Pesar y medir los ingredientes.
Lavar, secar y sacar el zeste de la naranja.
Romper los anises en la palma de la mano o en un mortero.
Abrir el huevo.
En un cazo calentar la leche hasta que alcance los 43º. Deshacer en ella la levadura con unas varillas manuales.
En un bol mezclar el azúcar, el aguardiente, los anises, el zeste de naranja y la leche con la levadura disuelta. Incorporar poco a poco la harina, trabajar la masa hasta obtener un compuesto homogéneo.
Tapar el bol con un paño de cocina y dejar reposar en un lugar cálido de 1,5- 2 horas, hasta que doble su volumen.
Una vez fermentada la masa volcar sobre una mesa de trabajo espolvoreada de harina. Dividir la masa en siete trozos de 100 gramos. Bolear la masa y dar forma.
Colocar los bollos en una bandeja de horno con papel sulfurizado y dejar reposar tapados unos 30 minutos o hasta que doblen su volumen.
Mezclar el azúcar de decoración con el agua.
Pintar los bollos con un huevo batido y repartir el azúcar mojado en la parte superior.
Hornear los bollos, en el horno precalentado, a 170º durante 12-15 minutos.
Dejar enfriar sobre una rejilla antes de servir.
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